La excelente campaña que venía desarrollando el Bidaideak esta temporada necesitaba de una rubrica al final de la primera vuelta de la Liga BSR. Y ésta no podía ser sino una victoria que le asegurara el honorifico título de campeón de invierno y que le permitiera acometer la segunda vuelta desde una posición de privilegio. La cancha del Pabellón Pilar Fernández Valderrama, un templo para el baloncesto en silla de ruedas, les invitaba a hacer historia – el Bidaideak nunca había terminado jamás en lo mas alto de la clasificación al finalizar una primera fase liguera- pero dejaba a los locales del Fundación Aliados Valladolid como juez inapelable de dicha posibilidad. Los pucelanos llevaban una mas que aseada competición y su equipo desarrolla un juego rocoso que pone en aprietos a cualquiera que pase por su feudo.
Lo sabían bien en Bidaideak y por eso salieron a cancha conscientes de que sólo poniéndose el mono de trabajo podían culminar con éxito su misión. Sabían que no era día para florituras ni para grandes exhibiciones de técnica individual y que sólo proletarizando su juego podían doblegar a los del Pisuerga. Y así salieron del vestuario conscientes de que era tarde para sudar por mucho que fuera del Pabellón el frio castellano no invitara a ello. Sus primeros giros de rueda en el parqué fueron sólidos y, primero con una canasta de Asier, y, después, con otras dos consecutivas de Hernández y Ruiz, conseguían poner un 0 a 6 en el marcador. Pero los aliados, no les dejaron crecerse ni un punto más; de la mano del colombiano Rodrigo Pérez y del argentino Adrián Pérez, conseguían frenar el inicio fulgurante de los bizkainos y, con una bandeja del base argentino Ruggieri se ponían, en el minuto 5, por delante en el marcador (9-8). Durante unos minutos el encuentro se convirtió en un toma y daca con aciertos de unos y otros, pero siempre con ventajas vallisoletanas, hasta que Asier, a falta de dos minutos para finalizar el primer cuarto, empatara la contienda y, después, David Mouriz, con una entrada limpia, le diera vuelta al marcador y cerrara el parcial con un 16 a 18.
Los primeros minutos del segundo cuarto siguieron siendo de intercambio de golpes entre ambos contendientes, pero a la mitad del mismo los bilbaínos consiguieron coger aire en el luminoso con un 21 a 29. La pareja de lanzadores Ruiz y Mouriz dejaron, entonces, la cancha para dejar sitio a Jannik Blair y Luis Jasso quien, enseguida, impuso sus centímetros en la pintura. Precisamente con una canasta suya bajo el aro, los bilbaínos conseguían las dos cifras de diferencia y con una entrada made in Asier, llegar al descanso con un 32 a 43.
El paso por vestuarios sirvió para que los equipos retornaran con más intensidad, si cabe, a cancha, siendo de mas efectividad los primeros minutos de los pucelanos que consiguieron reducir distancias con dos canastas de Ruggieri y de Vahid Saadatpoormoghadam (36-43). Precisamente el iraní, (para nosotros ya sólo Vahid) resultó ser el más productivo de su equipo, aunque sólo estuvo en cancha 20 minutos, al conseguir 16 de sus puntos con un 89% de efectividad.
Los bilbaínos supieron reaccionar al estrechamiento de las diferencias, y primeramente con dos tiros libres de Ruiz y luego con una canasta bajo el aro de Hernandez, volvían a la zona de seguridad de los dos dígitos, que conseguía ampliarse hasta los 16 puntos con las aportaciones por dos veces de Jasso y Mouriz (27-53). Con ese colchón de puntos en ventaja para el Bidaideak se llegó a la finalización del tercero de los parciales (43-59), que auguraba tranquilidad a bordo en sus filas para tramitar los diez minutos finales.
Pero el pucelano, ya se ha dicho, es un equipo rocoso e intenso que nunca baja las manos, y retomó el encuentro sin ganas de conceder tiempo alguno de sosiego a su rival. Poco a poco, fueron limando diferencias hasta dejarlas en 9 en el minuto 38. Lo siguieron intentando hasta el final, pero el baloncesto control ordenado en cancha por Asier García les impidió que fueran más allá y al 40 llegaron con el mismo diferencial (66-75).
Los puntos de los bizkainos fueron suscritos por Asier, 17, Jasso, 16, Ruiz, 16, Hernández, 12, David, 8, Txema 4, y Manu, 2.
Por los pucelanos, anotaron: Vahid, 16, Ruggieri, 14, Adrián, 14, Van Brunschot, 11 y Rodrigo Perez, 10.
Jasso y Van Brunschot, con 7 cada uno, destacaron en tareas reboteadoras y los mejores asistentes fueron Asier con 14 y Ruggieri con 8.
La victoria cosechada por Bidaideak lo proclama como ganador, de facto, de la primera parte de la Liga BSR, sabedor de que, aunque todavía a Mideba Extremadura, su más estrecho rival, le quedan dos partidos por disputar, no podrá, aunque los ganarán, conjugar el enorme diferencial de average con el que cuentan los bilbaínos.