Buen partido el disputado en la tarde de hoy el Pabellón Lepanto de Albacete entre dos equipos que, sin duda, son claros candidatos a ganar esta temporada el título de campeón de Liga. Intensidad, emoción, intercambio de liderazgo en el luminoso, hegemonía en el juego también repartida por momentos, fueron notas de un encuentro que, estamos seguros, habrá sido del gusto de todos los amantes del baloncesto en silla que no quieren sólo vistosidad fácil. Más contentos, por lógica habrán quedados los aficionados bilbaínos que si quiera por streaming habrán podido ver como su equipo era capaz de sobreponerse en la crisis de juego en la que entró en el segundo parcial y con confianza, serenidad y garra acabar imponiéndose con claridad al equipo manchego. Y es que, si bien el primer parcial tuvo color bizkaino -se llegó a su final con un 18 a 22 a su favor-, el segundo lo tuvo albaceteño. El juego interior de los chicos de Jesús Torres fue superior durante estos 10 minutos al expuesto por los de negro y con ese recurso como fundamento de su juego fueron haciendo brecha en el marcador hasta llegar al descanso con un 43 a 35 dominador. Y si la diferencia no fue de dos dígitos fue sólo porque David Mouriz enchufó un triple sobre la bocina.
Pero el tiempo en el vestuario sirvió para que Adrian Yañez recuperara el valor de sus pívots en cancha y, poco a poco, los bilbaínos fueron limando distancias hasta llegar al minuto 30 con un empate a 59 que dejaba las espadas en todo lo alto para los 10 minutos finales. Bidaideak supo entrar en estos minutos decisivos con más entereza y, punto a punto, fue abriendo hueco en el luminoso. Los pívots bilbaínos, Jasso y Manu, no dejaban explotar el juego en la pintura de Manning y Zarzuela y tanto Asier como Hernández secaban una y otra vez a las duplas de lanzadores que Torres ponía en cancha. Al tiempo, los centímetros del Bidaideak iban rompiendo cada vez más resolutivamente la defensa manchega en lo que colaboraba de manera decisiva las entradas en segunda línea de Asier y Hernández. Mención aparte merece el trabajo de zapa de Blair que con sus bloqueos continuos permitía el juego ofensivo de sus compañeros, así como su entrega en labores defensivas que incomodaron de manera continua el juego de construcción del Amiab. Con estos argumentos, los bilbaínos fueron poniendo diferencias en el marcador hasta llegar al 71 a 81 final que permite a la escuadra vasca consolidarse en lo más alto de la tabla, poner puntos de por medio ante un rival ms que directo y, en todo caso, ganar el average con ellos, que, visto lo visto, puede ser definitivo al finalizar la temporada.
Los puntos de los bizkainos fueron conseguidos por Asier, 20, Jasso, 19, Hernández, 18, Manu, 14, David, 5, Blair, 3 y Ruiz, 2.
Por los manchegos, sus máximos anotadores fue Choudhry, con 27, seguido de Ale Zarzuela, 19, Marsh, 10, y Manning, 9.
El mejor asistente del Bidaideak volvió a ser Asier Garcia que firmaba 19. El capitán firmaba 9 rebotes, los mismos que Manu Lorenzo.