Bidaideak no ha necesitado de una tercera ocasión para llevarse a sus vitrinas el título de campeón de Euroliga. Si el año pasado, en su feudo de Txurdinaga, el Galatasaray se lo quitaba en los últimos segundos, esta vez, con un básquet de muchísimos quilates, ha conseguido cobrarse revancha con otro equipo otomano e inaugurar su curriculum de campeón continental
El partido que han disputado el 28 de abril de 2019 en el Instituto Inglés del Deporte de Sheffield el Bidaideak de Bilbao y el Besiktas de Estambul ha hecho honor al título de final de Euroliga 2019.
Bidaideak llegaba a ella tras haber derrotado en semifinales al campeón francés Le Cannet, pero habiendo sido doblegado por el equipo turco en la fase de grupos. Cierto que en el último de los segundos, lo que venía a hablar de la igualdad entre estos dos equipos, pero, a fin de cuentas, derrotado.
Debió darle cien vueltas a la cabeza Esteban Nuñez para componer tácticas y poner protagonistas en cancha para no hacer posible que sobre la bocina se dilucidara el partido, y mucho menos con el signo del anterior. El Besiktas es un equipo de esos que el calificativo de sólido le viene como anillo al dedo. Con suficiente altura como para hacer suya cualquiera de las pinturas, con un poder de intimidación más que notable y con capacidad suficiente de tiro exterior como para convertir en victorias todos sus encuentros, el equipo que toma el nombre del barrio de Estambul donde se asienta, cuenta además con una plantilla suficientemente amplia como para que se puedan intercambiar quintetos sin excesivo resquebrajamiento en la calidad de su juego. Ganador de la Euroliga I en 2011, subcampeón en 2010 y 2014 y tercero en 2009 y 2018, es un clásico de las competiciones continentales, como lo es, lógicamente, de la domestica donde la rivalidad con Galatasaray es clásica. En la temporada 2015-16 le arrebató su hegemonía, y repitió campeonato en el año siguiente. En la 17-18, volvió a manos de los de Galata, pero en esta temporada les ha doblegado en todos los enfrentamientos que han tenido entre ellos, incluido el que les enfrentó en la semifinal de este torneo.
Núñez encomendó a Asier, Manu, Turek, O´Neill y Blair la construcción inicial de su juego. Y les repartió funciones muy claras. Los primeros 10 minutos lo fueron de una toma y daca continúo sostenido en el tanteador de los bizkainos por la muñeca de Turek y en el de los turcos por el talento de Yilmaz. Con la intensidad defensiva prevista, y un juego subterráneo al limite de lo legal, en las zonas, fueron pasando los minutos y cuando la bocina señaló su fin, el marcador señalaba un 18 a 20 en favor de los bilbaínos.
Decidió, en el interludio, Esteban Núñez meter más velocidad para el segundo parcial poniendo en cancha a Mouriz en detrimento de los centímetros de Manu Lorenzo. El cambio fue efectivo porque llevó a que el equipo tuviera más opciones en ataque fluido; a falta de 6 minutos, y con un O’Neill que cogía relevo en el lanzamiento, Bidaideak tomaba ventaja de 7 puntos, que llegaba a falta de 2 y medio a los 10 y que se bloqueaba en 8 al llegar al descanso (33-41).
En el tercero la ventaja crecía a su final en un punto (49-58), que se fue expandiendo en el ultimo parcial hasta los dos dígitos. Sin embargo, los turcos son jugadores con casi todo sabido y aún con una diferencia que cualquier otro equipo hubiera pensado imposible de saldar, intensificó su presión y poco a poco fue limando la diferencia que señalaba el marcador. A falta de 47 segundos Kaan metía un triple que comprimía la diferencia a sólo dos puntos (65-67), pero Tom O Neill recomponía la distancia y Joshua Turek con dos tiros libres perfectos facilitaba el llegar al 67 a 71 final.
Por los bizkainos, sumaron puntos Asier García (10), Joshua Turek (24), Jannik Blair (2), Tom O´ Neill (27), Manu Lorenzo (6) y David Mouiz (2).
Los del Besiktas fueron firmados por Yilmaz (26), Gezingi (4), Acar (2), Ymuk (2), Gumus (15), Safak (10) y Toprak (8).
Para Bidaideak esta victoria es, antes que nada, la confirmación de que el trabajo de reconstrucción del proyecto organizativo y deportivo que nació en 2013 está bien encaminado. Estructurado desde la modestia, pero a la vez desde la ambición, ha ido dando pasos en la captación y formación del talento a la par que en las clasificaciones, hasta conseguir instalarse por derecho propio en la élite estatal e internacional. Desde la presidencia de la entidad se quiere, expresamente, dedicar este logro a una “hinchada que cada vez en mayor número nos alienta cada sábado en Txurdinaga, a Bizkaialde y Bilbao Kirolak por su apoyo permanente, a HGB por facilitarnos tantas cosas y, como no, a la asociación Bidaideak que ha creído en este proyecto sustentándolo a todos los niveles”. Por otra parte, “deseamos hacer partícipe del éxito a toda la ciudadanía bizkaina que esperamos sienta el mismo orgullo de nosotros que el que nosotros tenemos al representarla. “Esperamos, también, hacernos un hueco en ese corazón que siente como propios las victorias del Athletic, el Bilbaobasket, el Loitek Gernika o el Zuazo Barakaldo, por mentar algunos, porque aspiramos que el deporte adaptado sea considerado de igual a igual con el resto de los deportes, también en el aspecto afectivo”